jueves, 5 de mayo de 2011

SEMANA SANTA 2011

Año tras año, la Iglesia Católica recuerda y vive la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro  Señor Jesucristo. Durante este tiempo los fieles se congregan en sus parroquias para adorar a Dios y vivir con Él lo que fueron los últimos momentos de vida de Jesús entre los hombres.



En la Iglesia Coromoto de la ciudad de San Cristóbal en el Estado Táchira; Venezuela, un grupo de personas entre ellos, niños y jóvenes, se unieron junto con el sacerdote y su equipo de pastoral, para llevar a cabo cada una de las actividades pautadas.


 
Debemos recordar siempre que Jesús vino al mundo fue por los pecadores, sin importar la clase social, raza, creencias, entre otros. Por lo tanto, nosotros debemos hacer lo mismo que él, es decir, dar nuestra vida por el prójimo. Luchemos para que el Corazón de Jesús sea amado en todas partes.


JOVEN NO TENGAS MIEDO, Y MENOS DE SEGUIR A CRISTO.


El miedo nos paraliza: el miedo a perder las seguridades que hemos ido alcanzando, nos impide avanzar hacia una vida mejor, más justa y feliz, para todos.


Pero ese miedo, que nos bloquea y no nos deja caminar, surge precisamente ante las posibilidades de cambio, ante la posibilidad de avanzar en una dirección. Este hecho, es uno de los aspectos positivos que encuentro en lo que rodea al miedo: este miedo, surge ante las intuiciones, ante los sentimientos, que vislumbran una vida mejor si avanzamos por el camino señalado. Y esta vida mejor, que se nos presenta como un sueño, puede dejar de serlo, y llegar a ser realidad, si de verdad creemos que es posible alcanzarla, si de verdad sentimos que sí se puede caminar hacia ella. Abandonar el miedo, con valentía, desde la confianza y siendo lo que cada uno, en esencia, somos, nos permitirá alcanzar lo que soñamos.


Hace tiempo, escuché que en la Biblia podemos encontrar hasta 365 veces, expresiones similares a “no temas”, “no tengas miedo”… como si Dios nos tuviera reservada una de esas expresiones, cada día del año, para poder afrontar sin miedo nuestros sueños, para poder afrontar sin miedo lo que para nuestra vida vamos descubriendo (en la oración, en la Palabra, en nuestras relaciones…)


 
Creer en lo que sueño…
… supone asumir los retos con valentía,
… supone confiar en Dios y, así, confiar en mí. Siento que la verdadera confianza en mi mismo está íntimamente ligada a la confianza en Dios, íntimamente ligada a tener la certeza de que podemos llegar a hacer grandes cosas, pero nunca solos, nunca desde la autosuficiencia.
… supone ser uno mismo, atreviéndonos a despojarnos de todo lo que nos impide ser lo que en esencia somos.

Siento que Dios, cada vez que parece proponerme una vueltecita de tuerca, un paso hacia delante, también me mira con cariño y me dice “no tengas miedo”.


No tengas miedo, no tengas miedo,
Si crees en lo que sueñas, lo alcanzarás.
Lo alcanzarás, si eres valiente.
Lo alcanzarás, si en ti confías.
Lo alcanzarás, si eres tú mismo.


 

Testimonios

Lo mejor de Semana Santa fue el aprendizaje vivido, respecto a mi mismo y  como no conocía el poder de Dios, que en realidad se manifiesta cuando uno mas lejos  se encuentra de  él,  te demuestra que esta hay para ayudarte y para darte lo que le pidas. Sólo tienes que buscarlo y te das cuenta, de que te hace falta.
Miguel Briceño
San Cristóbal



 
Decir que pase una semana diferente en mi vida seria poco, lo importante es poder expresar las cosas de transformación y cambio que pude experimentar con gente maravillosa y lo que pude trasmitir a muchas personas. Lo que me dejo claro fue el camino que debo tomar y profundizar, descubrí lo errada que vivía y pude sentir que Dios estaba siempre allí y lo único que tenia que hacer era atreverme a sentirlo, dejarlo vivir en mi vida. Invito a todos a dejar que  Dios este presente en la vida de cada uno de ustedes,  porque el es un padre amoroso y misericordioso que siempre esta para nosotros a pesar de que muchas veces nos olvidamos de él. Ámense mucho, sean felices y atrévanse a caminar con Cristo en sus vidas, el es nuestro mejor amigo y siempre estará para nosotros.

Brilena Ramirez
San Cristóbal


Como formando religioso de los Misioneros del Sagrado Corazón (WWW.MSCVENEZUELA.COM), me siento agradecido con Dios, primero por la grandeza de su amor. Segundo, porque a pesar de nuestras imperfecciones nos llama para servirle. Y tercero, por el privilegio que me dio de realizar mi pastoral con gente tan talentosa y servicial de la Parroquia Coromoto en Barrio Obrero y de las Capillas de San Miguel Arcángel, San Marcos de León y Cristo rey, pertenecientes a la Rectoría San Juan María Vianney del Barrio el Rio, capaces de trabajar por la construcción del Reino de Dios.
Nuestra Iglesia esta más viva que nunca, sólo debemos luchar  contra aquellos lobos que se disfrazan de ovejas y que le hacen daño. Recordemos que la mejor arma es la oración, la palabra de Dios y sobre todo la Eucaristía, donde Jesús se hace presente. Y a los jóvenes los invito con las palabras de nuestro Beato Juan Pablo II, a no tener miedo. Ustedes son el futuro, por lo tanto, Jesucristo cuenta con cada uno de ustedes para seguir llevando la Buena Nueva, sobre todo aquellos jóvenes que aun no conocen a Cristo.
José Sánchez
Maracaibo

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