Lucas 12.22 “Dijo luego a sus discípulos: Por tanto os digo: no os afanéis por vuestra vida, que comeréis; ni por el cuerpo, que vestiréis.
El hombre hoy en día tiende a vivir de una manera acelerada y desesperada por alcanzar ciertos logros o metas, con el único propósito de vivir bien en lo material, dejando de lado por completo lo espiritual, ya que para muchos lo espiritual de nada sirve en el contexto del día a día.
Los afanes en la humanidad solamente lo llevan por caminos de desesperación, angustias, depresiones, y en algunos casos pueden llegar a provocar la muerte. Por esto Cristo Jesús les advertía a su discípulos que no se afanaran por lo que habrían de tener o comer al siguiente día, puesto que cada día trae sus propias preocupaciones o bien sus propios logros.
Vivir la vida en un ambiente de paz, de esperanza, de fe, es en verdad aprender a vivir. La vida que Dios nos ha regalado es un Don (así con mayúsculas) que no podemos ni debemos desperdiciar; recuerda que en este planeta solamente estamos de paso, que viviremos solo una vez; entonces para que te complicas la vida afanándote en el mañana, o pensando en lo que habrás de hacer a futuro; mejor vive este día y deja que el mañana te traiga su propia forma o diseño ¿no lo crees?
En vez de angustiarte, toma las cosas con sabiduría; en vez desesperarte tómalo con calma; en vez de deprimirte por que lo que creías era un triunfo se convirtió en un fracaso, mejor disfruta de ese fracaso ya que es la única forma que Dios tiene para enseñarnos a levantarnos con mayor ahínco y buscar la victoria.
Mi amigo debes entender que la vida no dura para siempre, como tampoco nadie te garantiza el tiempo que te queda, por lo tanto ¡¡VIVE ESTE MOMENTO!! Disfruta de toda la belleza que te rodea, ve todo con optimismo, se propositivo, aleja de ti el mal humor y sonríe con todos y por todo. Apréndete esto: una cara sonriente, es el reflejo de una persona que desborda hacia el exterior toda la felicidad y el gozo que hay en su interior.
La palabra de Dios dice “Que una palabra suave derriba toda fortaleza” y es muy cierto; pero también “una sonrisa, una simple sonrisa puede transformar al mundo” y tu mi amigo eres un mundo (de proyectos, de sueños, de esperanza, en fin de muchas cosas).
Por último te recuerdo lo que Jesús nuestro Salvador dijo “Todo aquel que no sea como un niño, ese no entrará al reino de los cielos” ¿que quiso decir con esto? Muy simple mi amado de Dios QUE ACTUES, QUE PIENSES, QUE HABLES Y TE COMPORTES COMO LO HACE UN NIÑO, es decir, viviendo y disfrutando su momento, ya que para él no importa el mañana, en él no hay preocupación alguna, ni tampoco le corre prisa porque se acabe este día ¡¡NO!!
En la mente del niño solamente está el disfrutar y punto; él no se preocupa por su ropa, su comida, sus gastos o sus útiles escolares, no, porque sabe que de eso se encargará su Padre o su Madre. Pues bien así debemos hacer nosotros, que nuestro amado Padre Celestial se encargue de todo, ya que Él dejo una promesa en Filipenses 4.19 “Así que mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús”
Reflexión: “Vive este día plenamente como si fuera el último de tu existencia”
